ELECCIÓN DE JUECES REPRESENTA UN RIESGO PARA LA DEMOCRACIA EN MÉXICO Y PARA LA INTEGRACIÓN ECONÓMICA CON EE.UU. Y CANADÁ: KEN SALAZAR
El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, expresó su preocupación sobre la propuesta de elección directa de jueces en México, parte central de la reforma al Poder Judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Salazar advirtió que esta medida no solo podría debilitar la democracia en México, sino también afectar significativamente la integración económica de América del Norte, que involucra a Estados Unidos, Canadá y México.
En un comunicado oficial, el diplomático estadounidense argumentó que la elección popular de jueces no fortalecería el Poder Judicial, sino que lo expondría a una mayor vulnerabilidad frente a la corrupción política. “Basándome en mi experiencia de toda una vida apoyando el Estado de Derecho, creo que la elección directa de jueces representa un riesgo mayor para el funcionamiento de la democracia de México. Cualquier reforma judicial debe tener las salvaguardas que garanticen que el Poder Judicial sea fortalecido y no esté sujeto a la corrupción de la política”, afirmó Salazar.
Además, Salazar subrayó que esta reforma podría facilitar que cárteles y otros grupos criminales se aprovechen de “jueces inexpertos” con motivaciones políticas. La propuesta de eliminar ciertos requisitos de experiencia para los jueces también fue criticada, ya que, según Salazar, un Poder Judicial sólido debe estar compuesto por jueces con la capacidad de gestionar casos complejos como extradiciones y disputas comerciales. “Un Poder Judicial fortalecido en México debe contar con jueces capaces de gestionar litigios complejos para las extradiciones, disputas comerciales y otras cuestiones”, añadió el embajador.
Salazar también advirtió que el debate en torno a la posible implementación de la elección directa de jueces podría desatar un periodo de inestabilidad en México, lo que a su vez podría debilitar los esfuerzos para la integración económica de la región y afectar la relación comercial con Estados Unidos, el principal socio comercial de México. “Creo que el debate sobre la elección directa de jueces en estos tiempos, así como la política feroz si se llegaran a aprobar las elecciones de jueces en 2025 y 2027, amenazan la histórica relación comercial que hemos construido, la cual depende de la confianza de los inversionistas en el marco legal de México”, sostuvo Salazar.
El embajador insistió en la necesidad de garantizar un Estado de Derecho que genere confianza entre los inversionistas, permitiendo fomentar las inversiones en un “ambiente estable y predecible”. La posible aprobación de la reforma ha generado inquietud no solo en el ámbito político, sino también en el económico, con calificadoras y bancos internacionales expresando sus reservas sobre los efectos de esta medida.
La agencia Fitch Ratings advirtió que la iniciativa podría verse como una interferencia del gobierno en el Poder Judicial, lo que podría generar preocupaciones sobre la imparcialidad, independencia y calidad técnica de este poder. Por su parte, Morgan Stanley redujo la calificación de México en el ámbito de inversiones, señalando riesgos asociados a esta reforma.
Sin embargo, el presidente López Obrador desestimó estas advertencias, calificándolas de “pura mentira” y “politiquería”. “¿Se acuerdan cómo engañaban que si se aumentaba el salario iba a haber inflación? [...] Ya no le sigan creyendo a esta gente. Es pura mentira”, respondió el mandatario en una conferencia reciente.
Por su parte, la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, defendió la reforma judicial, asegurando que no representa un riesgo para las inversiones. Según Sheinbaum, los inversionistas están al tanto de los problemas de corrupción dentro del Poder Judicial y no deberían preocuparse por la reforma. “No tienen por qué preocuparse [...] quien conoce el Poder Judicial, incluidos los inversionistas, saben de los problemas de corrupción que hay ahí”, comentó en su conferencia de prensa del 21 de agosto.